Recientemente, la Asociación Americana de Psicología advirtió sobre la exposición de los adolescentes a los contenidos de las redes sociales.
Por: Luisa Ochoa
A través de un informe, el panel presidencial de la Asociación Americana de Psicología emitió una serie de recomendaciones sobre el uso de las redes sociales por parte de los adolescentes y alertó acerca de la vigilancia de ciertos contenidos que promueven comportamientos perjudiciales para el desarrollo de los menores de edad.
Las recomendaciones de los expertos se basan en la ciencia psicológica y la investigación de disciplinas relacionadas en el momento de la redacción del informe. En conjunto, estos estudios se llevaron a cabo con miles de adolescentes que completaron evaluaciones estandarizadas de funcionamiento social, conductual, psicológico y/o neurológico, e informaron (o fueron observados) involucrándose con funciones o contenidos específicos de los medios sociales.
Algunos adolescentes son más vulnerables a los contenidos de las redes sociales
Al respecto, la Dra. Thema Bryant, presidenta de la APA, afirmó que, "las redes sociales no son ni intrínsecamente perjudiciales ni beneficiosas para nuestros jóvenes. Pero debido a que los jóvenes maduran a ritmos diferentes, algunos son más vulnerables que otros a los contenidos y características de muchas plataformas de medios sociales que la ciencia ha demostrado que pueden influir en el desarrollo saludable".
El informe también recomienda las competencias psicológicas que deben poseer los jóvenes antes de utilizar las redes sociales, además de formación periódica de refuerzo para minimizar las posibilidades de daño y maximizar los beneficios que las redes sociales pueden proporcionar.
Aunque la advertencia sanitaria señala que no todas las conclusiones se aplican por igual a todos los jóvenes. "Los hallazgos científicos ofrecen un elemento de información que puede utilizarse junto con el conocimiento de los puntos fuertes y débiles de cada joven y de su contexto para tomar decisiones adaptadas a cada adolescente, familia y comunidad", afirmó la Dra. Bryant.
"El uso apropiado de las redes sociales en función de la edad debe basarse en el nivel de madurez de cada adolescente (por ejemplo, habilidades de autorregulación, desarrollo intelectual, comprensión de los riesgos y entorno familiar)", añadió.
Principales recomendaciones de los expertos
En un esfuerzo por orientar a educadores, padres, responsables políticos, profesionales de la salud mental y sanitaria, empresas tecnológicas y a los propios jóvenes, Bryant formó un grupo asesor para examinar la literatura científica pertinente y formular recomendaciones que garanticen que los adolescentes desarrollen prácticas saludables en los medios sociales.
En el informe también sugieren:
Adaptar el uso, la funcionalidad y los permisos de las redes sociales a las capacidades de desarrollo de los jóvenes; los diseños creados para adultos pueden no ser apropiados para los niños. Esto debe equilibrarse con las necesidades de privacidad de los jóvenes. La autonomía puede aumentar gradualmente a medida que los niños crecen y adquieren más conocimientos digitales.
Minimizar la exposición de los adolescentes a contenidos de las redes sociales que muestren conductas ilegales o psicológicamente inadaptadas, incluidos los contenidos que instruyan o animen a los jóvenes a autolesionarse o a adoptar conductas de alto riesgo o aquellos que fomenten conductas de desorden alimentario (como la alimentación restrictiva, las purgas o el ejercicio excesivo).
Minimizar la exposición de los adolescentes a contenidos en línea que promuevan la discriminación, los prejuicios, el odio o el ciberacoso, especialmente los dirigidos a grupos por motivos de raza, etnia, sexo, orientación sexual, religión o discapacidad.
Vigilar a los adolescentes para detectar signos de uso problemático de las redes sociales, que pueden mermar su capacidad para desempeñar sus funciones y rutinas diarias y presentar un riesgo de daños psicológicos más graves con el tiempo.
Limitar el uso de las redes sociales para que no interfieran con el sueño o la actividad física de los adolescentes, ya que ambos son necesarios para un desarrollo cerebral y psicológico saludable.
Limitar el uso de las redes sociales por parte de los adolescentes para contenidos relacionados principalmente con la belleza o la apariencia.
El informe es cuidadoso al señalar que, dada la investigación disponible públicamente, no es posible determinar si las redes sociales son la causa de los efectos nocivos en los jóvenes.
Además, se han realizado relativamente pocos estudios con jóvenes de poblaciones raciales, étnicas, sexuales, de género, socioeconómicas o con capacidades diferentes, y/o jóvenes con problemas crónicos de desarrollo o de salud.
No obstante, "esperamos que estas recomendaciones sean útiles para seguir el ritmo de los rápidos cambios en el ecosistema de las redes sociales", declaró el director ejecutivo de la APA, Arthur C. Evans Jr, PhD.
"La APA seguirá atenta a la evolución de las plataformas actuales y futuras, con la vista puesta en salvaguardar a nuestros jóvenes y permitirles beneficiarse de los aspectos positivos de los medios sociales", complementó.
El grupo asesor estuvo copresidido por Mary Ann McCabe, PhD, profesora clínica asociada de pediatría en la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington y miembro de la Junta de la APA, y Mitch Prinstein, PhD, director científico de la APA y profesor distinguido John Van Seters de psicología y neurociencia en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill.
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