El Dr. Alberto Rivera es el único ortopeda de Puerto Rico en realizar un novedoso procedimiento para el reemplazo de hombro.
César Fuquen Leal
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
Alberto Rivera, el beisbolista que se convirtió en ortopeda para ayudar a los jugadores que se lesionan a raíz de la práctica del deporte.
Esta es la historia del doctor Rivera, un abanderado ortopeda puertorriqueño que cuenta con una intachable experiencia en su especialidad. Este prodigio de la medicina es el único especialista de la isla en realizar un procedimiento -único en su tipo- para el reemplazo de hombro, el cual trae consigo múltiples beneficios para los pacientes que lo requieren.
En diálogo con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP), el doctor Alberto compartió sus anécdotas, deseos, pasiones y proyectos que a continuación usted conocerá.
Acercamiento con la medicina
Uno creería que la pasión por ser médico viene arraigada al ser humano desde que nace y muchas veces, como en el caso del doctor Rivera, no es así. Él es el primer médico de su familia y su deseo por estudiar esta rama del conocimiento estuvo relacionada con su primer amor: el béisbol.
“Yo tuve exposición como paciente en algún momento cuando era deportista y yo me lastimaba porque no me estaba quieto. De esa manera fue que empecé a ver cómo era ser médico y dar ese servicio que consiste en ayudar a las personas”, determinó el también Vicepresidente de la Sociedad de Ortopedia y Traumatología de Puerto Rico, Dr. Alberto Rivera.
Decisiones relacionadas a su profesión
El galeno jugaba béisbol en Barranquitas, su pueblo natal. A partir de ese momento comenzó una de las primeras encrucijadas de su vida: estudiar medicina y dejar el béisbol como un pasatiempo o dedicarse tiempo completo a este deporte. Sus padres fueron un apoyo para él en todas las situaciones de su vida, incluyendo esta difícil decisión.