El tratamiento de los tumores nasales y paranasales varía según su ubicación y tipo celular. Puede incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia e inmunoterapia.
Por: Jose Ibraim Alape
El diagnóstico de tumores nasales y paranasales implica una serie de procedimientos especializados. La endoscopia nasal, utilizando un tubo delgado con luz y cámara, permite visualizar la cavidad nasal y los senos paranasales, proporcionando imágenes para detectar posibles anomalías.
¿Qué es el cáncer nasal? Signos y síntomas
El cáncer de la cavidad nasal y los senos paranasales es un tipo de malignidad que afecta a la nariz y a las áreas cercanas como el paladar y el conducto que conecta la boca con la garganta. Algunos síntomas comunes de este tipo de cáncer incluyen congestión nasal y dolor cerca de los ojos.
Tipos y características de los tumores nasales o paranasales
Existen varios tipos de cáncer que pueden afectar la cavidad nasal y los senos paranasales. Los más comunes son el cáncer de células escamosas, el adenocarcinoma, el carcinoma adenoide quístico, el cáncer mucodermoide, el carcinoma indiferenciado, el melanoma, el estesioneuroblastoma, el linfoma y el sarcoma.
También hay tumores benignos como los pólipos nasales y los papilomas, que pueden requerir tratamiento dependiendo de su tamaño y los problemas que causen. De hecho, el papiloma invertido es un tipo de papiloma que se trata de manera similar al cáncer debido a su comportamiento más agresivo.
Biopsia de nariz y el muestreo preciso para los análisis
En caso de hallarse alguna irregularidad durante la endoscopia, se procede a la biopsia, extrayendo muestras de tejido para su análisis en laboratorio. Este procedimiento se realiza con herramientas especiales durante la endoscopia nasal, proporcionando información detallada sobre la naturaleza de las células.
Pruebas de imágenes
Además, las pruebas de diagnóstico por imágenes, como la tomografía computarizada y la resonancia magnética, ofrecen imágenes detalladas que facilitan la identificación y evaluación del tumor.
Tratamiento de tumores nasales y paranasales
El tratamiento de estos tumores varía según su ubicación y tipo celular. La cirugía, ya sea abierta o mínimamente invasiva mediante endoscopia nasal, es común para extirpar el tumor. Esta última opción utiliza herramientas especiales y una pequeña cámara para reducir la invasividad.
Además, hay opciones quirúrgicas que incluyen cirugía abierta, con incisiones cercanas a la nariz o la boca, y cirugía mínimamente invasiva mediante endoscopia nasal. La última opción permite a los cirujanos acceder al tumor con herramientas insertadas a través de la nariz, minimizando el daño a áreas circundantes.
Otros tratamientos incluyen radioterapia, quimioterapia e inmunoterapia, adaptándose a las necesidades individuales del paciente y la naturaleza del tumor.
Estrategias y apoyo integral en el cáncer nasal
Enfrentar un diagnóstico de cáncer nasal o paranasal puede ser abrumador. Se recomienda aprender sobre la condición para tomar decisiones informadas y mantener relaciones cercanas para obtener apoyo emocional y práctico.
Dicho lo anterior, las estrategias de afrontamiento como buscar a alguien con quien hablar, ya sea un familiar, amigo o profesional de la salud, son esenciales. Grupos de apoyo locales y recursos proporcionados por organizaciones como el Instituto Nacional del Cáncer pueden ser valiosos.
Participación del paciente en el plan de tratamiento
Por último, en este proceso, contar con el apoyo de familiares o amigos puede ser reconfortante y contribuir a recordar detalles importantes durante la consulta. En conjunto, estas medidas contribuyen a una gestión más efectiva de la condición y a una participación activa en el plan de tratamiento.