Adoptar hábitos alimenticios saludables es esencial para mantener tanto la salud física como mental a medida que envejecemos.
Por: Katherine Ardila
A medida que avanzamos en edad, nos encontramos en una etapa de la vida donde la salud y el bienestar se vuelven prioridades primordiales. En este camino hacia una vejez saludable, la alimentación juega un papel crucial. En este contexto la nutricionista-dietista, Lcda. Wanda González, destaca como el ejercicio y una dieta sana pueden contribuir al bienestar durante la adultez mayor.
A mayor edad, mayor pérdida de masa muscular
Uno de los desafíos más comunes a medida que envejecemos es la pérdida de masa muscular y la disminución de la movilidad gastrointestinal. La Lcda. González subraya la importancia de combinar el ejercicio con una ingesta calórica adecuada para mantener la masa muscular. En sus propias palabras: "Es importante para evitar esa pérdida de masa muscular, trabajar con el ejercicio, pero de igual manera es importante cumplir con ese requerimiento de ese metabolismo basal, que son esas calorías que nuestro cuerpo necesita para funcionar".
Además, señala que "en ocasiones somos bien restrictivos en qué alimentos consumimos así como carbohidratos y proteínas, el irnos por debajo de esos requisitos puede llevar a que nuestro cuerpo empiece a presentar pérdida de tonicidad o pérdida de esa masa muscular".
El estreñimiento también puede convertirse en un problema frecuente con la edad debido a cambios en la absorción de nutrientes y la movilidad gastrointestinal. Recomienda estrategias como la ingesta de pequeñas comidas frecuentes, ajustes en la consistencia de los alimentos y asegurarse de mantenerse hidratado para abordar este problema.
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Deficiencia del intestino en la absorción de nutrientesEn casos de dificultad para absorber nutrientes o mantener un equilibrio adecuado en la dieta, la Lcda. González aconseja consultar a un médico para considerar la posibilidad de suplementación. "Es importante tener en cuenta que, en casos de dificultad para absorber nutrientes, es crucial consultar a un médico para considerar la suplementación como parte del tratamiento complementario", enfatiza.
Resistencia a la insulina y altos niveles de glucosa en la sangre
La resistencia a la insulina es otro desafío que se enfrenta al envejecer, ya que el tejido adiposo tiende a aumentar y la masa muscular disminuye. La Lcda. González advierte sobre el consumo excesivo de alimentos azucarados y refinados. "A veces quizá las personas tienden a no cocinar y a picar bizcochitos, galletitas, cosas azucaradas que pueden predisponer a un descontrol de los niveles de glucosa" dijo. "Es necesario tener alternativas de alimentos que estén dentro del control de azúcares". En lugar de eso, sugiere incluir alternativas más saludables, como cereales integrales, frutas y vegetales para mantener un control adecuado de la glucosa en sangre y prevenir complicaciones relacionadas con la diabetes.
¿Cuál es la relación entre la alimentación y la salud mental?
La experta destaca la interconexión entre la alimentación y el bienestar emocional. Una dieta rica en azúcares y grasas saturadas puede exacerbar síntomas como la ansiedad y la depresión. "En efecto hay una relación directa entre nuestro sistema digestivo y nuestros estados de ánimo; se ha identificado que una alimentación alta en azúcares, harinas refinadas y alimentos altos en grasas pueden tener un impacto en cómo nos sentimos", advierte.
Para contrarrestar estos efectos negativos, recomienda optar por alimentos ricos en antioxidantes, que pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo y promover una mejor salud mental en general.