A pesar de los avances, aún no se comprende por qué un porcentaje significativo de pacientes, estimado entre el 30 % y el 45 %, desarrolla deterioro cognitivo incluso cuando cumplen rigurosamente con sus medicamentos y responden bien a ellos.
Por: Katherine Ardila
En el contexto de la 22.ª Convención de la Puerto Rico HIV Treaters Medical Association, celebrada en Guayanilla, la Dra. Valerie Wojna, especialista en neurología, ahondó sobre los principales desafíos que enfrentan los pacientes con VIH en relación a las complicaciones neurológicas, así como los avances en investigación para abordar estas problemáticas.
Según la especialista, una de las complicaciones más frecuentes en esta población, y a menudo subestimada en términos de educación y visibilidad, son los problemas cognitivos. Estas dificultades se manifiestan en la memoria, la orientación y la capacidad para realizar tareas simultáneamente, llegando a afectar significativamente las actividades de la vida diaria.
En sus palabras: "Muchas veces estos pacientes van a tener dificultad en recordar cosas, en orientarse en el espacio, en hacer varias cosas a la misma vez, y es lo suficientemente severo como para alterar sus actividades del diario vivir", explicó la neuróloga.
¿Cuál es el vínculo entre el VIH y las complicaciones cognitivas?
En las etapas iniciales de la epidemia de VIH, antes de la disponibilidad de la terapia antirretroviral, condiciones como la neuropatía periférica y las debilidades musculares eran comunes.
Sin embargo, la introducción y perfeccionamiento de estos tratamientos ha reducido su prevalencia. Hoy, el deterioro neurocognitivo ocupa un lugar predominante, en parte por el aumento en la esperanza de vida de los pacientes.
"Los pacientes con VIH que están con la terapia antirretroviral ya tienen una longitud de vida esperada, están viviendo mucho más, pero ese aumento en edad está trayendo complicaciones", dice. "Podemos ver complicaciones como obesidad, hipertensión, diabetes y resistencia a la insulina, que contribuyen al deterioro neurocognitivo en pacientes con VIH," señaló la experta, explicando que estas condiciones están asociadas tanto al envejecimiento como a la infección y su tratamiento a largo plazo.
Salud emocional en pacientes con VIHAdemás de los problemas cognitivos, los pacientes con VIH enfrentan un impacto emocional considerable.
La Dra. Wojna mencionó que muchos "pueden desarrollar depresión, apatía, ansiedad y problemas del sueño como parte de su enfermedad", sin embargo, aclaró que "Esto puede ser una complicación del virus como tal, pero también puede ser por la edad o por los medicamentos que se estén tomando".
Aunque los efectos emocionales pueden manifestarse de forma aguda, muchos pacientes experimentan síntomas a largo plazo que requieren intervención oportuna. "Ya sea que se presenten complicaciones agudas o crónicas, deben atenderse, pues existen tratamientos que pueden mejorar la calidad de vida de estos pacientes", señaló la experta.
Sin embargo, explica que "todavía no sabemos por qué hay un grupo de pacientes que a pesar de estarse cuidando, de tomarse los medicamentos y de responder a ellos, hay alrededor de un 30 - 45% de los pacientes que todavía desarrollan deterioro cognitivo".
Nuevos hallazgos en materia de salud en Puerto Rico
Para esto, en Puerto Rico, la comunidad científica está activa en la búsqueda de biomarcadores que permitan predecir y manejar las complicaciones neurológicas asociadas al VIH a tiempo.
Investigadores como la Dra. Loida Meléndez, la Dra. Giselle Cantres y el Dr. Lester Rosario, junto con el equipo liderado por la Dra. Wojna, están explorando factores biológicos, sociales y demográficos que puedan influir en el desarrollo de estas complicaciones.
"Hemos encontrado que las mujeres en Puerto Rico están ejecutando peor que los hombres en pruebas cognitivas, y que existe una mayor prevalencia de resistencia a la insulina en nuestra población, particularmente entre las mujeres. Esto podría estar relacionado con el deterioro cognitivo," explicó la investigadora.
A pesar de los avances, aún no existe una "solución mágica" para prevenir o revertir completamente el deterioro neurocognitivo en pacientes con VIH.
Sin embargo, la neuróloga explicó que la clave está en la prevención y el manejo temprano. "Mantener la carga viral indetectable, asegurar niveles adecuados de células CD4 y adoptar una higiene cerebral óptima—que incluye dormir bien, comer adecuadamente, hacer ejercicio y evitar el consumo excesivo de alcohol o tabaco—son las mejores herramientas que tenemos hoy en día", concluyó.