La molécula eliminó células de leucemia a través de un proceso de apoptosis, en lugar de necrosis, que es el mecanismo habitual en la mayoría de los tratamientos quimioterapéuticos actuales.
Por: Katherine Ardila
El estudio, realizado por el Instituto Butantan y el Hospital Albert Einstein en Brasil, ha arrojado resultados prometedores sobre el potencial del veneno de la araña cangrejo Vitalius wacketi, como un nuevo tratamiento para el cáncer.
Esta especie, que pertenece a la familia de las tarántulas y es conocida por su veneno tóxico, se ha convertido en el centro de investigaciones que podrían transformar las terapias oncológicas.
¿Por qué es importante el veneno de estas arañas para el tratamiento contra el cáncer?
La Vitalius wacketi, originaria de la costa del estado de São Paulo, es una araña cangrejo de la familia Theraphosidae. Su veneno, previamente temido y subestimado, ahora se investiga por sus propiedades terapéuticas.
El biólogo Pedro Ismael da Silva Junior, investigador en el Laboratorio de Toxinología Aplicada del Instituto Butantan, ha estado analizando la actividad biológica del veneno de la araña.
En colaboración con el bioquímico Thomaz Rocha e Silva, del Hospital Albert Einstein, el equipo se ha centrado en extraer y estudiar diversas toxinas del veneno de diferentes especies del género Vitalius. Durante su investigación, encontraron que la toxina derivada de la Vitalius wacketi mostró resultados más prometedores en la lucha contra el cáncer.
Para estudiar el veneno, el equipo utilizó un proceso de síntesis en laboratorio para obtener una molécula de poliamina, un compuesto que abunda en el veneno. Posteriormente, purificaron la sustancia utilizando una técnica cromatográfica específica, desarrollada por Rocha en 2010, que se enfoca en las poliaminas y permite eliminar contaminantes, asegurando así la eficacia del compuesto.
Mecanismo de acción del veneno en las células cancerosasUna vez purificada, se realizaron pruebas in vitro para evaluar la capacidad de la nueva molécula en la lucha contra células cancerosas.
Los resultados fueron sorprendentes: la molécula no solo eliminó células de leucemia, sino que lo hizo a través de un proceso de apoptosis o muerte celular programada, en lugar de necrosis, que es el mecanismo habitual en la mayoría de los tratamientos quimioterapéuticos actuales.
El investigador Thomaz Rocha e Silva explicó que "la apoptosis permite que la célula tumoral avise al sistema inmunitario de su muerte, facilitando la eliminación de los fragmentos celulares de manera controlada y sin causar inflamación", lo que representa un avance significativo en el tratamiento del cáncer, donde la inflamación puede agravar la condición del paciente.
Uno de los aspectos más alentadores de esta nueva molécula es su tamaño y la simplicidad del proceso de síntesis, lo que podría traducirse en un costo más bajo y un acceso más amplio al tratamiento en comparación con otros medicamentos actuales.
Fases futuras de investigación
El equipo ahora se prepara para investigar la eficacia del veneno en células cancerosas de pulmón y hueso. Además, se planea evaluar la seguridad del compuesto en células humanas sanas, para asegurar que sea selectivo y no cause daño a tejidos no cancerosos.
Los investigadores han patentado el proceso de obtención y producción de la nueva molécula y buscan licencias para continuar sus estudios a mayor escala, con la meta de realizar ensayos clínicos en animales y, eventualmente, en humanos.
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