La infección se transmite mediante el sexo vaginal, anal u oral, y la bacteria se encuentra presente en el semen, el líquido preseminal y los fluidos vaginales.
Por: Mariana Mestizo Hernández
La clamidia, conocida también como clamidiasis, es una infección bacteriana común que puede tratarse eficazmente con antibióticos. Se encuentra entre las enfermedades de transmisión sexual (ETS) más prevalentes.
La mayoría de las personas infectadas no presenta síntomas, por lo que es importante conocer información sobre la clamidia, incluyendo su definición, métodos de detección, tratamiento y prevención.
Es una infección común
La infección por clamidia es ampliamente extendida y afecta a una gran cantidad de personas. Se trata de una infección bacteriana que se adquiere generalmente a través del contacto sexual con una persona infectada. Se estima que alrededor de tres millones de estadounidenses, principalmente entre los 14 y 24 años de edad, contraen clamidia cada año.
Puede afectar diversas áreas del cuerpo
La clamidia se transmite mediante el sexo vaginal, anal u oral, y la bacteria se encuentra presente en el semen, el líquido preseminal y los fluidos vaginales. Esta infección puede afectar diversas partes del cuerpo, incluyendo el pene, la vagina, el cuello uterino, el ano, la uretra, los ojos, la garganta y la boca. A menudo, las personas infectadas no experimentan síntomas evidentes, lo que puede llevar a que desconozcan su condición.
Tratamiento a base de antibióticos
El tratamiento de la clamidia se realiza de manera efectiva mediante el uso de antibióticos. Si no se trata adecuadamente, esta infección puede dar lugar a problemas de salud graves en el futuro.
Por esta razón, es fundamental someterse a exámenes de detección de enfermedades de transmisión sexual (ETS), anteriormente conocidas como enfermedades venéreas. Detectar y tratar la clamidia en sus etapas iniciales es esencial para una recuperación más rápida.
¿Cómo se propaga la infección por clamidia?
Por lo general, la infección se transmite a través de las relaciones sexuales con una persona infectada, y es posible contraerla incluso en ausencia de eyaculación. Las vías principales de contagio son las relaciones sexuales vaginales y anales, aunque también es posible la transmisión durante el sexo oral.
En raras ocasiones, la infección puede transmitirse al tocar los ojos con las manos contaminadas con fluidos infectados. Asimismo, existe el riesgo de transmisión de clamidia de madre a hijo durante el parto, si la madre está infectada.
¿Cómo se puede transmitir?
Es importante destacar que la clamidia no se propaga a través del contacto casual, como compartir alimentos o bebidas, dar un beso o un abrazo, tomar de la mano, toser, estornudar o utilizar un inodoro. La mejor manera de prevenirla es utilizar condones o barreras bucales de látex en cada encuentro sexual.
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