Al momento de realizar un trasplante se pierde mucha sangre del paciente, por lo que se recurre a las transfusiones de sangre. Sin embargo, existe una técnica para evitar esta pérdida de sangre durante una cirugía de trasplante de hígado, la que a pesar de que no es utilizada en Estados Unidos, el doctor Juan Del Río Martin, director clínico del Auxilio Centro de Trasplante del Hospital Auxilio Mutuo, sí la utiliza en la Isla, reduciendo en un 50 por ciento la cantidad de los pacientes que requieren sangre tras la cirugía.
Al momento de realizar un trasplante se pierde mucha sangre del paciente, por lo que se recurre a las transfusiones de sangre. Sin embargo, existe una técnica para evitar esta pérdida de sangre durante una cirugía de trasplante de hígado, la que a pesar de que no es utilizada en Estados Unidos, el doctor Juan Del Río Martin, director clínico del Auxilio Centro de Trasplante del Hospital Auxilio Mutuo, sí la utiliza en la Isla, reduciendo en un 50 por ciento la cantidad de los pacientes que requieren sangre tras la cirugía.
"Cuando tú haces un trasplante el hígado, está cirrótico. Lo que ocurre normalmente es que se produce lo que es hipertensión portal, es decir la sangre que tiene que retornar de los intestinos a través del hígado se encuentra con unas venas esclerosadas por donde no puede pasar la sangre y va aumentando la presión de la sangre y empieza a generar bypasses a través del hígado, del esófago…", explica el doctor.
Entonces, añade, los cirujanos tienen que "operar en un territorio con una presión venosa muy alta", lo que provoca que cualquier abertura que se haga provoque un sangrado muy grande. Para evitar este sangrado utiliza la técnica llamada shunt porto cava temporal.
El doctor Juan Del Río Martin, quien realizó el primer trasplante de hígado en Puerto Rico.[/caption]
"Lo que hacemos es que en la parte inicial de la cirugía, la vena que lleva toda esa sangre de los intestinos, que debe pasar por el hígado y no está pasando, en las primeras fases la preparamos y la conectamos a la vena principal que llega al corazón. De modo que ya no existe esa diferencia de presión, ya las venas alrededor del hígado van a tener una presión mínima, porque ya la sangre no tiene que pasar por el hígado, la hemos conectado a una vena que no tiene presión, que es la vena cava", expresa Del Río Martin, quien fue el primer cirujano en realizar un trasplante de hígado en Puerto Rico en el 2012.
Indica que uno de los beneficios de esta técnica, además de no tener que transfundir al paciente con sangre, es que mantiene el volumen necesario de sangre en todo el cuerpo del paciente durante toda la cirugía.
Del Río Martin destaca el uso de esta técnica en un país como Puerto Rico, donde hay escases de sangre en ciertos momentos del año, y todavía más cuando existe la posibilidad que en alguna complicación se requiera el uso de más sangre para el paciente.
No obstante, esta técnica que fue inventada hace muchos años, no es utilizada en Estados Unidos, a pesar de sus beneficios para el paciente. El doctor no conoce el por qué, pero entiende que como el entrenamiento de trasplantes es uno fuerte, los médicos continúan trabajando con lo que ya saben y no realizan prácticas nuevas.