El humo de cigarrillo reprograma a las células no cancerosas que rodean a las cancerosas y este contacto contribuye a impulsar la agresividad del cáncer de cabeza y cuello.
Eso ha evidenciado la revista Molecular Cancer Research con la publicación del estudio realizado por investigadores de la Universidad Thomas Jefferson de Estados Unidos.
Este descubrimiento ha sentado las bases de un futuro ensayo clínico en el que esperan poder mitigar el estado metabólico negativo inducido por el humo del cigarrillo, combinado un medicamento aprobado para la diabetes llamado metformina, que se dirigirá al metabolismo alterado de las células cancerosas, con una inmunoterapia también aprobada llamada durvalumab.