Aunque las tasas de incidencia y mortalidad del cáncer colorrectal han disminuido en pacientes de 50 años o más, las tasas de cáncer colorrectal de aparición temprana han aumentado en las últimas dos décadas.
JANO
Una investigación del Centro de Cáncer MD Anderson de la Universidad de Texas, en Estados Unidos, indica que el cáncer colorrectal diagnosticado a una edad temprana tiene características clínicas y genéticas que son diferentes de las que se observan en el cáncer colorrectal tradicional diagnosticado más adelante en la vida. El estudio, publicado en Cancer, también reveló ciertas características únicas en pacientes especialmente jóvenes.
Aunque las tasas de incidencia y mortalidad del cáncer colorrectal han disminuido en pacientes de 50 años o más, las tasas de cáncer colorrectal de aparición temprana han aumentado en las últimas dos décadas. Para buscar diferencias entre el cáncer colorrectal de aparición temprana y tardía, los investigadores del analizaron información sobre más de 36.000 pacientes de cáncer colorrectal.
Los científicos descubrieron que los pacientes más jóvenes tenían más probabilidades de poseer ciertas mutaciones genéticas y ciertos subtipos de cáncer colorrectal que los pacientes mayores. Además, entre los pacientes con cáncer colorrectal de inicio temprano, los pacientes muy jóvenes (de 18 a 29 años de edad) eran únicos frente a los pacientes mayores (de 30 a 49 años de edad) en cuanto a las características clínicas y genéticas de su cáncer.
Del mismo modo, los pacientes con cáncer colorrectal de inicio temprano que tenían afecciones predisponentes, como enfermedad inflamatoria intestinal, presentaban características clínicas y genéticas diferentes en comparación con los pacientes sin trastornos predisponentes.
Necesitamos apreciar que existen subtipos biológicos únicos en pacientes jóvenes que pueden afectar a la forma en que se comportan sus cánceres y pueden requerir un enfoque personalizado del tratamiento", dice el autor principal, Jonathan Loree.
En el futuro, se debe prestar especial atención clínica, y se deben realizar más investigaciones científicas, tanto para pacientes muy jóvenes con cáncer colorrectal como para aquellos con afecciones médicas predisponentes", concluye.