La experta precisó que la prevención es clave para evitar condiciones graves.
Por:
La doctora Eneida De La Torre, dermatóloga y pasada presidenta de la Sociedad Puertorriqueña de Dermatología, indicó de manera exclusiva a Medicina y Salud Pública que la dermatitis atópica tiene un componente genético importante dentro de los criterios diagnósticos en los pacientes que la padecen.
"Se sabe que hay factores genéticos y existe algo que se denomina la tríada atópica, esto significa que los pacientes que padecen de dermatitis atópica van a tener en su genética o en su historial familiar condiciones como asma, rinitis alérgica y dermatitis en la piel", explicó.
"Cuando un paciente se nos presenta con dermatitis atópica, siempre le preguntamos si en su familia hay historial de estas condiciones, pues está comprobado que estos factores de riesgo están unidos y que por lo consiguiente, permiten que se desarrolle esta predisposición genética", agregó.
Otro aspecto importante que destacó es que los niños que han padecido de infecciones respiratorias como la bronquiolitis, también podrían sufrir de asma y de dermatitis atópica.
"En Puerto Rico vemos mucho lo que es el polvo del Sahara y los hongos. Cuando se presentan estos cambios climáticos donde los pacientes tienden a empeorar en fechas en específicas como el verano, los pacientes experimentan un picor exacerbado. Para ello se hace un llamado a los padres, para cuidarnos más como por ejemplo, manteniéndonos frescos, y en el invierno al revés, viene el frío, pues debemos humectar bien la piel porque sabemos que es el ambiente el que desencadena la condición, porque ya genéticamente tenemos esa predisposición", explicó.
Asimismo, indicó que el sol por sí solo no es un factor determinante para la exacerbación de la condición, puesto que, como indicó al principio, los factores genéticos son los que predominan a la hora de presentar la dermatitis atópica. Por otro lado, rayos ultravioletas son una opción terapéutica para esta condición.
"Se sabe que la barrera de la piel está afectada por un factor genético, entonces el paciente no puede tener una estructura íntegra de su piel y es esa barrera protectora la que está encargada de protegernos del ambiente y las bacterias. Cuando no está trabajando adecuadamente esta barrera de nuestra piel es que entonces viene la predisposición a desarrollar las erupciones en la piel", dijo.
Indicó que en sus consultas los pacientes mencionan los aumentos de temperatura como uno de los momentos en los que sienten mayores molestias, "en lo que se conoce como fototerapia que es coger la luz solar, que es uno de los tratamientos para la condición y así que sabemos que el problema no es la luz solar, sino que es en general el calor y el ambiente que hace que los pacientes puedan tener estos episodios".
Mencionó que la dermatitis es una condición en donde casi el 60% de los pacientes va a presentarla en sus primeros años de vida, y hasta 90% de los pacientes la podrían experimentar en los primeros cinco años de su vida.
"Lo que quiere decir que son los niños los que empiezan a manifestar esta condición, para ello hacemos un llamado de educación a los padres para que traten adecuadamente la piel de sus hijos desde la infancia, llevándolos al pediatra y al dermatólogo para lograr hacer un diagnóstico certero y desde temprana edad", exhortó.
Incidencia de la dermatitis desde la infancia a la adultez
Respecto a si un paciente pediátrico puede crecer con la condición, la doctora De La Torre precisó que la literatura médica ha mostrado que algunos niños pueden continuar con la condición hasta la edad adulta, pero también depende del seguimiento médico de ese niño.
"Si el paciente no recibe el tratamiento correcto porque su factor es genético, puede tener recurrencia a través de la vida. Se sabe que un 50% de los niños van a tener su condición en la niñez y usualmente en la adolescencia. En esta última etapa tiende a ceder, mientras que está el otro 50% que tienen la condición bastante persistente a través de su vida y hay otro porcentaje que son los adultos que la presentan por primera vez en su adultez", explicó.
Nutrición en pacientes con dermatitis
La especialista explicó que la nutrición si puede afectar nuestro organismo, ya que hay alimentos que generan alergias en los pacientes, pero no solo es lo que consumen, sino el medio ambiente que los rodea.
"El paciente por su condición y por razones genéticas está propenso a desarrollar este tipo de afecciones por medio de lo que circunda en el ambiente, como mencioné anteriormente el polvo, el frío, el calor, pero también lo que comemos afecta el desarrollo de este tipo de alergias", sostuvo.
Reiteró que existen algunos alérgenos que ya están probados y que no son beneficiosas para los pacientes que sufren de dermatitis atópica. "Algunos alimentos como la leche de vaca, huevos, maní, pescado, soya, trigo y comidas procesadas no son recomendables para este tipo de pacientes. Sin embargo, cada persona y cada organismo es diferente, es por ello por lo que les reitero siempre que, si observan que al comer algo y de momento la piel se exacerba, ese alimento lo deben evitar", recalcó.
Tratamientos para la dermatitis atópica
Enfatizó de otra parte la importancia de acudir a tiempo al especialista, ya sea el dermatólogo o a el pediatra, quienes deberán guiar a los pacientes sin importar su edad para que esta condición este controlada y por lo tanto no afecte su salud mental.
"Siempre le decimos a los pacientes que deben evitar jabones y perfumes muy fuertes, buscar también productos especiales para lavar la ropa, libres de perfumes o recomendados por dermatólogos. Las especificaciones anteriores deben tenerlas presentes para el cuidado general de su piel", dijo.
En referencia a los tratamientos en casos severos la dermatóloga explicó que "no todos los esteroides para el tratamiento son iguales, de modo que el tratamiento debe ser personalizado, solo así se puede evitar riesgos mayores".
En el caso de que los tratamientos mencionados anteriormente no tengan los resultados esperados, existen medicamentos a base de inyecciones que ya se han probado específicamente para la condición de dermatitis atópica, que van a trabajar directamente en esa cascada de inflamación que causa que la piel se inflame y desarrolle picor, informó.
Salud mental en pacientes con dermatitis
De otra parte, destacó que es importante el apoyar a estos pacientes pues la enfermedad afecta directamente su entorno social y emocional.
"En el caso de un niño, por el tema de los jabones, las cremas y todo el cuidado que conlleva esta condición, adicional por como el picor afecta el sueño, es una enfermedad cutánea muy molestosa", dijo.
Otro elemento para considerar es que el aspecto de la piel a causa de la dermatitis puede ser objeto de burla, sobre todo en los niños. Incluso existen pacientes que tienden a taparse la piel con camisas manga larga en épocas de calor intenso, porque no quieren que su piel se vea.
"Esto es entonces una situación difícil para el paciente, que le hace sentir estigmatizado hasta el punto de llegar a pensar que es una enfermedad contagiosa, lo que no es así, la gente tiende hacer preguntas incómodas sobre la condición, pero lo que las personas no saben es que la dermatitis atópica es difícil de tratar y cada paciente responde diferente al tratamiento", dijo la Dra. De La Torre.
Por esa razón resaltó que este problema dermatológico no se contagia de persona a persona, ya que es el paciente que hereda la condición y es el ambiente que hace que se exacerbe.
"La piel es el órgano más grande del cuerpo, la piel siempre va a tener algo, así que nosotros creemos que cada paciente debe tener su dermatólogo y acudir a este por lo menos una vez al año", finalizó.
Vea la entrevista completa: