Las investigaciones publicadas recientemente en la revista JAMA Cardiology, concluyen cómo el COVID-19 puede tener un impacto prolongado sobre la salud del corazón en aquellos que se han recuperado de la enfermedad y pueden haber causado una infección cardíaca en aquellos que murieron.
Diana Castañeda
Las investigaciones publicadas recientemente en la revista JAMA Cardiology, concluyen cómo el COVID-19 puede tener un impacto prolongado sobre la salud del corazón en aquellos que se han recuperado de la enfermedad y pueden haber causado una infección cardíaca en aquellos que murieron.
El estudio recopila información de 100 pacientes que se recuperaron del SARS-CoV-2 y de quienes la resonancia magnética cardíaca reveló compromiso cardíaco en 78 pacientes (78%) e inflamación miocárdica en curso en 60 pacientes (60%), que fue independiente de las condiciones preexistentes, la gravedad y el curso general de la enfermedad aguda, y el tiempo desde el diagnóstico original.
Por su parte, CNN publicó que la cardióloga Dra. Nieca Goldberg, directora médica del Programa del Corazón de la Mujer de la NYU y asesora principal para la estrategia de salud de la mujer en NYU Langone Health en Nueva York mencionó que “Hace unos meses que entendemos que el COVID-19 no es solo una infección respiratoria sino una infección multisistémica”.