Desde los 10 años la paciente presentaba amenorrea, por lo que puede ser razonable pensar que el tumor había estado creciendo durante 2 años.
Una niña de 12 años con obesidad infantil que acudió a su médico de atención primaria (AP) con amenorrea secundaria y dolor abdominal desde hacía 2 a 3 meses y aumentaba la frecuencia en los días previos a su visita, fue diagnosticada con tumor de células granulosa juvenil (TCGJ) de ovario, en estadio 1 y con presencia de hiperprolactinemia, galactorrea y amenorrea en la adolescencia.
El TCGJ casi siempre es sintomático, presentándose a menudo con síntomas asociados al hiperestrogenismo, como desarrollo precoz de las mamas, aumento del vello púbico y sangrado vaginal. En pacientes mayores, las irregularidades menstruales pueden ser el principal síntoma. Debido a la localización de los TCG, la hinchazón abdominal, el dolor y/o un tumor palpable en la parte inferior del abdomen pueden ser síntomas de su presencia.
Diagnóstico médico
La exploración física de la paciente permitió observar galactorrea en ambas mamas. Los exámenes adicionales revelaron niveles elevados de prolactina de 70,5 ng/mL (normal 4,8-23,3 ng/mL) en un contexto de un nivel total de beta HCG de <0,6 (normal 0,0-1,0 mUI/mL). Posteriormente, la paciente recibió un diagnóstico de trabajo de hiperfunción hipofisaria anterior no especificada.
El médico de cabecera solicitó una ecografía abdominal/pélvica para evaluar mejor el dolor abdominal. La ecografía mostró de forma incidental una gran masa en el lado izquierdo de la pelvis, con sospecha de una posible neoplasia.
Tras estos hallazgos, la paciente fue vista en el Servicio de Urgencias (SU). Se repitió la ecografía pélvica con Doppler en urgencias para evaluar la posible torsión ovárica, con nueva demostración de la masa pélvica y sin hallazgos de torsión ovárica. Fue ingresada para evaluación y tratamiento adicionales.
La paciente fue sometida a una laparotomía exploradora y se le detectó una gran masa ovárica izquierda originada en el ovario izquierdo, por lo que se le practicó una salpingooforectomía izquierda.
La masa se extirpó en bloque, ya que no había ovario identificable en el lado izquierdo, pero sí en el derecho. La masa resecada pesaba 1.425 g y se limitaba al ovario, sin evidencia macroscópica de metástasis (figura 3). No se detectaron lesiones en el hígado, el diafragma o el epiplón cercanos.
Tratamiento
A la paciente se le realizó una cirugía para poder extraer el tumor, al momento del procedimiento se logró evidenciar que la masa estaba adherida al ovario, con la cápsula intacta y no se halló tumor superficial en el ovario ni en las trompas de Falopio, ni invasión linfo-vascular.
Al cuarto día de la operación la paciente fue dada de alta debido a su buen postoperatorio sin complicaciones.