Siempre se ha dicho que el desayuno es una de las comidas más importantes en el día, pero no se habla mucho de las consecuencias que esto trae para tu corazón.
Por: Redacción MSP
Desayunar en pocas cantidades o tener una dieta mal balanceada influye en los factores de riesgo frente a enfermedades cardiovasculares.
De acuerdo con investigadores, desayunar menos del 5 % de las calorías diarias necesarias, es decir, menos de 100 en una dieta de 2.000 calorías aumenta el riesgo de lesiones ateroscleróticas en las arterias.
Un desayuno aportar cerca del 20% de la energía total que se requiere a diario. En esta dieta se deben incluir fibra, proteína, agua y una cantidad adecuada de grasa, vitaminas y minerales. Normalmente, los alimentos que se consumen se dividen en tres 3 grupos:
Leche y sus derivados
Estos alimentos aportan proteínas, grasa, hidratos de carbono, vitaminas liposolubles en lácteos enteros, fósforo y calcio. En caso de que seas intolerante a la lactosa puedes recurrir a alimentos que puedan sustituirlos nutricionalmente.
Cereales y sus derivados
Estos alimentos aportan hidratos de carbono complejos, un poco de proteína y poca grasa además de vitaminas del grupo B y minerales. Los cereales de grano entero, aportan fibra insoluble, lo que ayuda a alcanzar los 25 gramos de fibra que se deben consumir diariamente. Los cereales deben ser integrales y no azucarados.
El pan, las galletas y demás productos de panadería sin gluten, pueden sustituir derivados del trigo.
Frutas
Las frutas alimentan hidratos de carbono, fibra, minerales, vitaminas, especialmente, A y C. Es recomendable consumir mínimo tres porciones diarias. Para aprovechar las bondades de este alimento es preferible consumirlo enteras, debido a que en zumo o batidos pierden gran cantidad de fibra y vitaminas.
A parte de estos grupos que se mencionan, también es importante agregar otros alimentos como aceite de oliva extra virgen, tomate, frutos secos, huevos, jamón.