Los pacientes pediátricos hispanos pueden representar un desafío ante el posible diagnóstico de Enfermedad Inflamatoria Intestinal de Inicio Temprano (IBD) y pudieran presentar síntomas infecciosos, anatómicos, entre otros, aunque no presente historial clínico significativo.
Se debe considerar dentro de los diagnósticos diferenciales a la diverticulosis colónica.