El mes de septiembre, marcado por el regreso al trabajo, es común que reflexionemos sobre nuestros objetivos y metas para el próximo año. El manejo del estrés en nuestra vida diaria suele ser uno de los desafíos más recurrentes en esta época.
Por: Stephania Cortés
El estrés es una respuesta natural del organismo que nos ayuda a enfrentar situaciones de emergencia a corto plazo. Sin embargo, cuando este se vuelve crónico, los efectos adversos comienzan a manifestarse en diversas áreas de nuestra vida, afectando desde nuestro desempeño laboral hasta nuestras relaciones personales y, por supuesto, nuestra salud en general.
El Dr. Andrés Martín Asuero, especialista en reducción del estrés y fundador del Instituto esMindfulness, explica que el estrés crónico puede identificarse a través de tres ámbitos principales: la salud física, las relaciones interpersonales y el entorno laboral.
El impacto del estrés en la salud física
Desde el punto de vista de la salud, el estrés crónico puede manifestarse en forma de dolencias y problemas físicos. "El estrés suele comenzar afectando al sistema digestivo, provocando problemas como úlceras, y también puede dar lugar a trastornos del sueño, dolores de cabeza y tensiones musculares", señala el Dr. Martín Asuero.
Sin embargo, advierte que estos síntomas a menudo se tratan de manera superficial con medicamentos, lo que sólo enmascara el problema subyacente sin abordar la verdadera causa.
Relaciones personales en peligro
En el ámbito de las relaciones, el estrés puede llevar a conductas como discusiones frecuentes, aislamiento social y una menor capacidad para disfrutar de la compañía de los demás. "La conexión interpersonal es un factor protector clave para la salud mental y física, pero el estrés afecta nuestra capacidad de socializar y conectarnos con otros", enfatiza el Dr. Martín Asuero.
El estrés en el entorno laboral
En cuanto al trabajo, el Dr. Martín Asuero destaca que el estrés nos lleva a operar bajo un constante sentido de urgencia, lo que reduce nuestra capacidad para disfrutar y comprometernos con nuestras tareas.
"El estrés nos vuelve más acelerados, lo que aumenta la probabilidad de cometer errores y disminuye la satisfacción laboral, contribuyendo a una vida menos plena y más monótona", advierte.
¿Cómo identificar el exceso de estrés?
"El estrés se convierte en un problema cuando empieza a afectar negativamente nuestra calidad de vida", indica el Dr. Martín Asuero. Sin embargo, recalca que estos síntomas no son una condena, sino una señal de alerta que nos indica la necesidad de hacer cambios en nuestra vida.
Entre los efectos colaterales del estrés, uno de los más importantes es el impacto en la salud cardiovascular. "El estrés eleva la tensión arterial, lo que a largo plazo puede cronificarse y derivar en problemas de salud más graves", explica el especialista.
Alimentación y digestión bajo presión
Otro daño colateral del estrés se relaciona con la alimentación y el sistema digestivo. "El estrés no solo puede causar problemas digestivos, como las úlceras, sino que también altera nuestros hábitos alimenticios, llevándonos a consumir más alimentos con alto contenido calórico, lo que a su vez puede provocar sobrepeso y niveles elevados de colesterol", añade.
Inflamación sistémica: Un efecto menos visible pero significativo
El Dr. Martín Asuero también destaca que el estrés puede desencadenar una liberación de sustancias inflamatorias por parte del sistema inmunológico, lo que, aunque menos visible, puede causar un daño considerable al organismo. "Aunque es más difícil de detectar, un médico puede identificar estos efectos inflamatorios", puntualiza.
Prevención: Restaurando el equilibrio interno
Para prevenir estos efectos adversos, el Dr. Martín Asuero enfatiza la importancia de ser conscientes de los síntomas del estrés y tomar medidas para restaurar el equilibrio.
"La homeostasis es un principio fundamental del organismo, que busca siempre mantener un equilibrio interno frente a los desafíos externos. Si no reconocemos que hemos perdido ese equilibrio, será más difícil recuperarlo", concluye.
Además, el experto aconseja aprender a responder de manera consciente a las situaciones estresantes, en lugar de reaccionar impulsivamente.
"El estrés es una respuesta natural del cuerpo, pero no debe convertirse en un enemigo crónico. Con un enfoque consciente y estrategias adecuadas, es posible prevenir que el estrés tenga un impacto negativo duradero en nuestra vida", finaliza el Dr. Martín Asuero.
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