En una investigación transforman la bacteria más común de la piel en una 'fábrica' de compuestos terapéuticos contra diversas afecciones cutáneas
Por: Laura Guio
Un equipo de investigadores de la Universidad Pompeu Fabra ha alcanzado un hito significativo en el campo de la dermatología al conseguir "domesticar" la bacteria Cutibacterium acnes, el microorganismo más abundante en la piel humana.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista 'Cell Systems', demuestra cómo esta bacteria puede ser modificada para producir compuestos terapéuticos de manera controlada.
Los científicos, bajo la dirección del Dr. Marc Güell y Guillermo Nevot, han desarrollado un innovador sistema genético que permite controlar el comportamiento de la bacteria.
Este "kit de herramientas" incluye un plásmido que contiene diferentes secuencias genéticas, permitiendo regular la producción de compuestos terapéuticos según las necesidades específicas del tratamiento.
Resultados prometedores contra el daño solar
En las pruebas iniciales, el equipo demostró la eficacia de su sistema utilizando antioxidantes como compuesto terapéutico.
La bacteria modificada fue capaz de generar estos compuestos en respuesta a estímulos controlados, logrando reducir significativamente el estrés oxidativo en queratinocitos (células de la piel) expuestos a radiación UV.
Los resultados mostraron una correlación directa entre los niveles de actividad del gen introducido y la reducción del estrés oxidativo.
Perspectivas futuras en tratamientos dermatológicos
Los investigadores prevén el desarrollo de cremas cosméticas y terapéuticas que contendrían millones de estas bacterias modificadas, capaces de producir antioxidantes en respuesta a estímulos naturales.
Esta tecnología podría revolucionar el tratamiento de diversas condiciones cutáneas, incluyendo:
Envejecimiento prematuro
Cáncer de piel
Ventajas sobre otros tratamientos
La elección de Cutibacterium acnes no es casual. Esta bacteria presenta ventajas significativas para su uso terapéutico:
Mantiene poblaciones estables y duraderas en la piel
Vive naturalmente en los folículos pilosos
Tiene mínima interacción con otras especies bacterianas
Puede trasplantarse fácilmente mediante aplicaciones tópicas
Su presencia se asocia con una piel saludable
Este avance representa un paso significativo en el desarrollo de tratamientos dermatológicos personalizados y más efectivos, abriendo nuevas posibilidades en el campo de la medicina dermatológica.
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