Ingerny Polanco
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
¿Cómo recibir un trasplante dual de corazón y no morir en el intento? Luis Correa de Jesús tiene la respuesta a través de su experiencia, compartiendo cómo ha sido su vida antes, durante y después de ser sometido a un trasplante simultáneo de corazón y riñón, del cual hacen ya 12 años.
Todo comenzó en 1983, cuando el resultado de una biopsia determinó que Luis tenía una condición denominada glomerulonefritis membranosa, la cual es la inflamación de los pequeños filtros de los riñones.
A raíz de esta situación, los especialistas que consultó le recomendaron un seguimiento médico exhaustivo, pero por desconocimiento y falta de experiencia no acudió de manera frecuente a las terapias, lo que desencadenó que su riñón derecho se atrofiara, a tal punto, que hubo que recurrir a la diálisis.
En ese entonces, Luis trabajaba en el Tribunal de Menores de San Juan, por lo que optó por comenzar con la diálisis peritoneal desde su casa, lo que conllevaba un proceso de nueve horas diarias y el riesgo de obtener una infección, la cual se convirtió en realidad, pues obtuvo una peritonitis.