El evento climático que llegará a la isla de Puerto Rico encendió las alarmas de la comunidad, en especial para los pacientes de diabetes que se pueden ver afectados en el almacenamiento de medicamentos y alimentos.
Por: Carolina Cortés
Ante la llegada de la tormenta tropical Ernesto, que amenaza con impactar directamente a Puerto Rico, la preocupación se extiende más allá de las medidas de seguridad básicas. Para quienes viven con condiciones crónicas como la diabetes, el manejo adecuado de los medicamentos y la planificación previa son esenciales para evitar complicaciones de salud.
La Dra. Leticia Hernández, Endocrinóloga y ex presidenta de la Sociedad de Endocrinología y Diabetología de Puerto Rico, compartió con la Revista Medicina y Salud Pública algunos consejos sobre cómo los pacientes de diabetes deben prepararse ante la llegada de fenómenos atmosféricos como la tormenta “Ernesto”.
Preparación anticipada
Según menciona la endocrinóloga, es fundamental preparar una mochila de emergencia, un consejo que no se aplica solo para los diabéticos, sino para cualquier persona con condiciones crónicas.
"No debemos esperar a que llegue un fenómeno atmosférico para tener esos hechos preparativos", subrayó. La temporada de huracanes es un recordatorio para mantener siempre a mano una lista de medicamentos, identificaciones, tarjetas de seguro y documentos importantes, todo debidamente protegido contra la humedad.
Además, recomienda contar con un suministro de agua adecuado, al menos un galón por persona para tres días, y una provisión de medicamentos suficientes para un mes. Este nivel de preparación es crucial, especialmente para aquellos que dependen de la insulina, un medicamento que puede verse comprometido en caso de cortes prolongados de electricidad.
El manejo de la insulina durante una emergencia
Uno de los mayores desafíos que enfrentan los pacientes diabéticos durante una emergencia es la conservación de la insulina. "Muchas personas optan por congelar la insulina para preservarla, lo cual es un error que daña el medicamento", advirtió la Dra. Hernández. Los frascos de insulina que no han sido abiertos deben mantenerse refrigerados, pero una vez abiertos, el especialista resalta que “si yo no tengo manera de refrigerarlo, puedo mantener a una temperatura que esté por debajo de los 86 grados, por lo menos yo”. Va a durar 28 días”.
Sin embargo, si pasan esos 28 días y no se tiene acceso a un nuevo frasco oa atención médica, la Dra. Hernández recomendó seguir utilizando la insulina, siempre y cuando no muestre signos de deterioro como grumos o cambios de color. "Es mejor continuar utilizando la insulina que no usarla en absoluto, aunque podría no ser tan efectiva", explicó.
Consejos para el almacenamiento de otros medicamentos
La Dra. Hernández también ofreció recomendaciones sobre el almacenamiento de otros medicamentos orales y tirillas de insulina, los cuales no deben ser expuestos a temperaturas extremas. "Las tirillas deben mantenerse siempre en su envase original y en un lugar fresco para evitar que se dañen", aconsejó.
En situaciones donde el acceso a la electricidad es limitado, la Dra. Hernández sugirió métodos alternativos para mantener los medicamentos en condiciones adecuadas. Por ejemplo, los frascos de insulina pueden colocarse en bolsas resellables dentro de cacerolas con agua templada, y ubicarlas en el lugar más fresco de la casa. Usar un abanico de batería también puede ser útil para reducir la temperatura y prolongar la vida útil del medicamento.
Manejo de la dieta durante la tormenta
La tormenta no solo interrumpe el acceso a la electricidad y los medicamentos, sino también a la alimentación adecuada. "Es importante que tratemos de mantener nuestra dieta, aunque va a haber momentos en que tengamos que recurrir a alimentos enlatados", señaló la Dra. Hernández. Recomendó enjuagar los vegetales enlatados para reducir su contenido de sodio y optar por versiones bajas en sodio siempre que sea posible.
Para quienes dependen de la insulina, es vital mantener una ingesta regular de alimentos para evitar niveles peligrosamente bajos de glucosa. En caso de tener que ajustarse a una dieta de emergencia, la Dra. Hernández instó a seguir las instrucciones del médico respecto a las dosis de insulina necesarias.
Efectos del estrés en la glucosa
El impacto emocional y el estrés que conlleva la espera y el paso de una tormenta también pueden afectar los niveles de glucosa en las personas con diabetes. La Dra. Hernández explicó que durante momentos de estrés, el cuerpo libera hormonas que pueden elevar los niveles de azúcar en la sangre. "Es importante utilizar técnicas de relajación como la música, la meditación o ejercicios ligeros para controlar esta respuesta natural del cuerpo", recomendó.
Además, aconsejó moderar la exposición a las noticias para evitar que la situación de emergencia agrave el estrés emocional.