Hombre desarrolló síntomas agudos de sudoración, náuseas y vómitos durante tomografía computarizada 4D, las imágenes revelaron pinzamiento de la vena cava inferior entre la aorta y el riñón derecho
Por: Laura Guio
Un hombre de aproximadamente 80 años, con antecedente de hipertensión arterial controlada y exfumador (índice Brinkman 580), fue referido al servicio de oncología radioterápica tras el hallazgo incidental de un nódulo de vidrio esmerilado mixto (GGN) en el lóbulo superior derecho del pulmón, inicialmente de 1 cm, que aumentó progresivamente hasta 1.5 cm en cinco años, con crecimiento del componente sólido.
El paciente mantenía un estado funcional (PS) de 1, con vida mayormente domiciliaria. Los marcadores tumorales (CEA y CA19-9) no mostraron alteraciones.
A pesar de la recomendación de broncoscopia, el paciente rechazó procedimientos invasivos, por lo que, tras revisión multidisciplinaria, se decidió proceder con SBRT ante la alta sospecha de adenocarcinoma pulmonar en estadio clínico IA1 (cT1miN0M0).
Episodio agudo durante la tomografía 4D
Durante la tomografía computarizada cuatridimensional (4D-CT) —usada para medir el movimiento respiratorio del tumor—, el paciente desarrolló súbitamente sudoración intensa, náuseas y vómitos, lo que obligó a suspender el procedimiento.
Llamativamente, los síntomas desaparecieron al sentarse. Ante la recurrencia de las molestias al intentar recostarse, se exploró la posibilidad de una respuesta posicional.
El paciente refirió que desde hacía décadas evitaba dormir en posición supina o lateral izquierda debido a episodios de malestar y náuseas similares, lo cual había pasado inadvertido en su historia clínica.
Hallazgos imagenológicos y hemodinámicosEl estudio con variaciones posicionales reveló presión arterial dependiente de la postura:
Sentado: 155/92 mm Hg
Supino: 149/84 mm Hg
Lateral izquierdo: 130/63 mm Hg
Las imágenes mostraron una vena cava inferior comprimida entre el riñón derecho y una aorta abdominal tortuosa, sin evidencia de masas o tumores retroperitoneales. Esta disposición anatómica explicaba el pinzamiento dinámico de la VCI al adoptar ciertas posiciones, reduciendo el retorno venoso y desencadenando síntomas de hipotensión.
Este patrón contrasta con la compresión de la VCI típica del embarazo, donde la posición lateral izquierda suele aliviar la obstrucción; en este caso, la posición lateral izquierda la exacerbaba, debido a la orientación anómala de los órganos abdominales.
Tratamiento y adaptación terapéutica
Ante la imposibilidad de realizar el tratamiento en posición supina, el equipo de radioterapia modificó la técnica de SBRT, eligiendo la posición prona con inclinación lateral derecha, que evitaba la compresión.
El paciente fue tratado con 56 Gy en cuatro fracciones, utilizando terapia de arco modulado por volumen. El monitoreo intraoperatorio no mostró recurrencia de los síntomas, y el tratamiento fue completado con éxito.
Evolución y seguimientoDurante los controles posteriores, el paciente permaneció asintomático y sin nuevos episodios de hipotensión. A los 6 meses, las imágenes torácicas mostraron neumonitis por radiación grado 1 (CTCAE v5), resuelta al año con fibrosis estable y sin evidencia de recurrencia tumoral.
No se detectaron lesiones abdominales o retroperitoneales que comprometieran nuevamente la vena cava. Se recomendó evitar posiciones supinas prolongadas y mantener una adecuada hidratación.
El servicio de cardiología consideró innecesario realizar pruebas invasivas adicionales, dada la estabilidad clínica.
DiscusiónEste caso según los autores Shinya Neri et al., destaca una manifestación posicional inusual de compresión idiopática de la vena cava inferior, un fenómeno raramente descrito en pacientes sin masas abdominales.
La literatura médica documenta casos similares asociados a quistes renales gigantes, hidronefrosis masiva o tumores retroperitoneales, pero no se habían reportado episodios idiopáticos relacionados con la planificación de radioterapia torácica.
Las variaciones anatómicas —como una aorta tortuosa o desplazada lateralmente— pueden generar puntos de compresión dinámica sobre la VCI, especialmente en pacientes mayores, donde los cambios estructurales por envejecimiento alteran la relación entre los órganos.
En este contexto, la adaptación posicional durante la SBRT no solo permitió continuar el tratamiento, sino que además evitó complicaciones hemodinámicas. Este enfoque individualizado demuestra la importancia de integrar la observación clínica con los hallazgos de imagen en la toma de decisiones terapéuticas.