La disminución de la circulación sanguínea en manos y pies se produce por una contracción de los vasos sanguíneos, que enlentece la llegada de sangre.
Especialistas insisten en que se consulten los síntomas con el reumatólogo, que sigan las indicaciones sobre el calzado más adecuado y eviten el sobrepeso.
La disminución de la circulación sanguínea en manos y pies se produce por una contracción de los vasos sanguíneos, que enlentece la llegada de sangre.