El esófago de Barrett es dos veces más común en hombres que en mujeres, y suele presentarse con frecuencia en pacientes con antecedentes de reflujo gastroesofágico.
Por: María Camila Sánchez
Según datos de la Asociación Puertorriqueña de Gastroenterología, un 20% de la población adulta padece reflujo dos veces por semana. Sin embargo, la frecuencia o intensidad de esta afección no necesariamente se relaciona con el desarrollo del esófago de Barrett, una condición en la que la mucosa del esófago se asemeja al revestimiento del intestino delgado.
La literatura médica señala como posible causa del esófago de Barrett, la inflamación prolongada de la mucosa de esta área, ocasionada por el reflujo gastroesofágico.
Las características de esta enfermedad, fueron detalladas durante este fin de semana en la Convención Anual de Patología y Medicina de Laboratorio. Y para conocer más sobre el enfoque de estas conferencias, la Revista Medicina y Salud Pública conversó en exclusiva con la Dra. Gloria Ramos, presidenta de la Academia Patología y Medicina de Laboratorio.
"Nos enfocamos en cómo diagnosticar esa displasia, que es el precursor del cáncer. Y es posible identificarlo bajo la histología".
Vea el programa completo aquí.
Es importante tener en cuenta que el tejido del esófago es un epitelio escamoso, y en la zona que conecta al estómago, se convierte en tejido glandular. Sin embargo, ante la presencia de la condición, ese tejido glandular se extiende hacia áreas adyacentes donde no debería estar.
"Primero tenemos el esófago de Barrett, luego tenemos la displasia y, si no es tratada a tiempo, se puede convertir en carcinoma", mencionó.
Por otro lado, la especialista señaló que dentro de los principales síntomas de la condición se encuentra la acidez estomacal.
"El ácido va dañando ese epitelio, y el epitelio se transforma de un epitelio escamoso a un epitelio glandular de manera reactiva para protegerse del ácido", explicó. "Tener eso sin tratarse, puede convertirse en una malignidad".
Prevalencia a nivel mundial
El esófago de Barrett es dos veces más frecuente en hombres que en mujeres, y es más común en pacientes que desarrollan reflujo gastroesofágico en edades tempranas.
Por lo tanto, la literatura médica enfatiza en la necesidad de evaluar frecuentemente a los pacientes de 50 años o más con antecedentes de reflujo persistente o que hayan necesitado medicamentos para controlar la acidez por períodos controlados.
Herramientas diagnósticas
En cuanto a la detección del esófago de Barrett, la especialista especifica que es un diagnóstico sencillo que se realiza mediante una endoscopia, y ante la sospecha de una lesión o cambio en la mucosa esofágica, se toma una biopsia que confirma las sospechas iniciales.
Fuente de información complementaria aquí.