Fiscalía solicita condena a la médica debido a la falta de claridad y decisión de la paciente a la cual se le practicó la intervención.
Este lunes 26 de agosto la fiscalía de ese país ha solicitado a la Haya una sentencia por ¨asesinato¨ a la geriatra, aunque no exista condena clara y precisa por parte de la ley para este tipo de casos. La profesional de más de 60 años realizó la intervención en 2016 a una paciente de 74 años quien padecía Alzheimer.
En 2012 la paciente fallecida pidió ayuda por escrito para morir si padecía demencia, aunque luego hizo comentarios contradictorios sobre su propia muerte. Según los solicitantes antes la haya, la paciente afirmó: “quiero la eutanasia, pero ahora no”. Aunque los fiscales han subrayado las buenas intenciones de la especialista, sostienen que “ante la duda, debió haber hablado de forma más explícita con la enferma antes de proceder”.
Hablé con ella en tres ocasiones de su deseo de morir”, añadió la especialista. Mientras continúa el proceso, aún se analiza la la frontera entre la eutanasia legal y el asesinato, o bien, un ¨homicidio”, para diferenciar lo ocurrido, contemplados en el Código Penal.
En casos similares, uno ocurrido en 2015, un tribunal de apelación de la ciudad holandesa de Arnhem decidió que Albert Heringa, que ayudó en 2008 a morir a su madre, de 99 años, no debía ser procesado. Los jueces concluyeron que el hijo tuvo que escoger entre obedecer las leyes y “el deber moral, no escrito, de ayudar a su progenitora”, a morir con dignidad. En Bélgica, donde la eutanasia es también legal, la fiscalía señaló en 2018 que tres médicos debían ser investigados por haberla aplicado, supuestamente sin garantías, a Tine Nys, una mujer de 38 años que tenía síndrome de Asperger, una forma de autismo.
Según la legislación holandesa solo se permite la eutanasia a petición del paciente. Asimismo, debe estar consciente y solicitarla de forma reiterada, sufrir un dolor insoportable y tener una enfermedad incurable. Una declaración escrita puede sustituir a la oral si el afectado ya no puede expresarse, y el médico debe asegurarse de que cumple todos los requisitos. También está obligado a consultar con otro colega.
No obstante, la especialista consideró que bastaba con la declaración escrita firmada antes de la enfermedad. La ley exige que el paciente repita, incluso si ha firmado un testamento vital, la petición de eutanasia. “Pero ahí radica el problema: con la demencia no siempre es posible”, admite la fiscalía¨.
La eutanasia ahora juzgada se practicó en el hogar de ancianos, en presencia del marido de y de la hija de ambos. Hasta el momento se haya a la espera que el caso que durará dos días en su proceso, aporte luz a un asunto con ramificaciones jurídicas, pero también éticas y espirituales .En casos de mala praxis, la norma fija penas de hasta 12 años de cárcel.