Durante la pandemia de COVID-19, muchos de los pacientes renales se han abstenido de ir a los centros de salud para la hemodiálisis.
César Fuquen Leal
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
Debido a procesos inflamatorios, los pacientes con insuficiencia renal tendrían peor pronóstico por COVID-19. Para tratar su condición, un significativo porcentaje de ellos debe someterse a la hemodiálisis que ayuda a los riñones cuando no son suficientemente saludables como para funcionar de manera adecuada.
Durante la pandemia de COVID-19, muchos de los pacientes renales se han abstenido de ir a los centros de salud para la hemodiálisis. Este factor incide negativamente en el progreso de su enfermedad, lo que a largo plazo aumentaría significativamente la mortalidad. Así lo evidenció el nefrólogo Eddie Rodríguez Castro en entrevista con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP).