Mientras que el número de contagios de COVID-19 continua en aumento, alcanzando sus cifras más altas durante los últimos meses, el virus está cobrando la vida de cientos de puertorriqueños.
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
Mientras que el número de contagios de COVID-19 continúa en aumento, alcanzando sus cifras más altas durante mayo, junio y julio, el COVID-19 cobró la vida de 443 puertorriqueños durante agosto.
El SARS-CoV-2 fue la causa de al menos 177 muertes en el pasado mes. Estas cifras equivalen a apróximadamente el 40 por ciento de aumento de decesos, comparado con los meses anteriores.
Uno de los aspectos que más preocupa a la comunidad médica-científica de la isla, es que el coronavirus cobró la vida de al menos 5 y 6 boricuas diaramente durante el octavo mes del año. Se presume que el país se encuentra en el momento más crítico en cuanto a fallecimientos.
El Dr. Marcos López, catedrático de la Universidad de Puerto Rico en Humacao y Gerente de Investigaciones de Puerto Rico Public Health Trust hizo un análisis de los decesos por COVID-19 en la isla y evidenció el difícil panorama en materia de salud pública al que se enfrenta la población boricua.
Más afectados
Entre los grupos de contagio con mayor incidencia del virus durante el mes de agosto se encontraron las personas entre los 40 ya 49 años de edad. Sin embargo, más del 80 por ciento de las muertes ocurrieron en personas de más de 60 años.
Los días promedio desde la fecha de diagnóstico hasta la muerte llaman bastante la atención: al menos el 80 por ciento de las personas murieron en un lapso de 15 a 20 días.
En cuanto a género, los números indican que al menos el 45 por ciento de las muertes fueron en féminas y el otro 55 por ciento en hombres. Aunque los científicos alertan que estos resultados pueden variar y no deben ser tomados como tendencia, lo cierto es que el gobierno debe tomar medidas más estrictas que garanticen la salud de todos los puertorriqueños.