A pesar de su alta prevalencia, sólo el 12% de los adultos ha oído hablar del síndrome cardiovascular-renal-metabólico, una condición potencialmente mortal pero reversible que conecta el corazón, los riñones y el metabolismo
Por: Laura Guio
El síndrome cardiovascular-renal-metabólico (CRM), una condición que representa uno de los desafíos de salud pública más urgentes de nuestro tiempo, según revela una reciente encuesta de la Asociación Americana del Corazón (AHA).
El síndrome CRM agrupa enfermedades cardíacas, enfermedades renales, diabetes y obesidad en un sistema interconectado que los expertos describen como uno de los "círculos completos" más esenciales del organismo. De hecho, 9 de cada 10 estadounidenses están afectados por un síndrome del que la mayoría nunca ha escuchado hablar.
El círculo vicioso que amenaza la salud"Los sistemas cardíaco, renal y metabólico están conectados y, como tales, deben tratarse de forma coordinada", explicó el Dr. Eduardo Sánchez, director médico de prevención de la AHA.
El funcionamiento es relativamente simple pero devastador: el corazón bombea sangre por todo el cuerpo, el sistema metabólico quema azúcar para obtener energía, los desechos se vierten en la sangre, los riñones los filtran y regulan la presión arterial, que a su vez afecta cómo bombea el corazón.
"Es un círculo completo", añadió Sánchez. "Puede cuidar su salud en general con controles regulares de su presión arterial, colesterol, peso, azúcar en la sangre y función renal".
Factores de riesgo alarmantemente comunesAproximadamente el 90% de los adultos estadounidenses tienen al menos un factor de riesgo de CRM, que incluyen hipertensión, colesterol anómalo, niveles altos de azúcar en sangre, exceso de peso y reducción de la función renal.
La interacción de estos factores multiplica exponencialmente el riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular e insuficiencia cardíaca.
Según datos de la AHA, 1 de cada 3 adultos en Estados Unidos presenta al menos tres factores de riesgo simultáneos de enfermedad cardiovascular, diabetes o enfermedad renal.
Las señales de alerta que no debe ignorarEl síndrome CRM es especialmente peligroso porque puede avanzar silenciosamente. Los síntomas varían según el sistema más afectado, lo que dificulta su reconocimiento temprano.
Síntomas cardiovasculares: Falta de aire, fatiga persistente, dolor en el pecho, hinchazón en piernas y tobillos, y latidos irregulares.
Síntomas renales: Cambios en la orina, retención de líquidos, fatiga extrema y dificultad para concentrarse.
Síntomas metabólicos: Sed excesiva, micción frecuente, visión borrosa, hambre constante y cicatrización lenta de heridas
Mitos peligrosos sobre la saludLa encuesta reveló percepciones erróneas preocupantes: el 42% de los encuestados creía que un corazón sano probablemente no se dañaría por enfermedades de otros sistemas de órganos, y el 68% pensaba incorrectamente que es mejor manejar las afecciones individuales una a la vez.
Estas creencias contradicen directamente la naturaleza del síndrome CRM, donde los problemas en un sistema inevitablemente afectan a los demás.
Las cinco etapas del síndromeEl síndrome CRM progresa en cinco etapas claramente definidas:
Etapa 0: Sin factores de riesgo, enfocada en prevención
Etapa 1: Primeras señales como exceso de grasa abdominal o prediabetes
Etapa 2: Aparición de diabetes tipo 2, presión arterial alta o enfermedad renal
Etapa 3: Inicio de problemas cardiovasculares sin síntomas claros
Etapa 4: Problemas cardíacos evidentes, incluyendo ataques cardíacos o insuficiencia cardíaca
La buena noticia es que para la mayoría de las personas, el síndrome CRM es reversible con medicamentos y cambios en el estilo de vida, como alimentación saludable y ejercicio regular.
Los expertos recomiendan consumir frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras, además de realizar al menos 30 minutos de actividad física diaria.
Interés público crecienteA pesar del desconocimiento generalizado, existe un fuerte interés en el tema: el 79% de los encuestados consideró importante comprender la salud CRM y el 72% expresó interés en aprender más sobre cómo se diagnostica y trata.
"Es tranquilizador que una vez que se definió la conexión de CRM, casi tres cuartas partes de los que respondieron entendieron que era importante y querían aprender más", destacó Sánchez.