Este estudio destaca la importancia de investigar los subtipos de Esclerosis Múltiple con respecto a las definiciones, el diagnóstico y el tratamiento.
Por: Belinda Burgos
En esta oportunidad se trata de caso en donde una mujer de 41 años, diagnosticada con Esclerosis Múltiple en 2001 (a los 21 años) y actualmente tratamiento con alemtuzumab, que se presentó en el Centro de Esclerosis Múltiple de San Juan en febrero de 2021 para una evaluación de seguimiento de brotes y remisiones activo.
En el examen se determinó que la paciente presentó debilidad bilateral de las extremidades inferiores con la ayuda de la silla de ruedas, vejiga neurógena, estreñimiento, deterioro de la marcha, pérdida de coordinación y deterioro cognitivo leve.
“En la presente visita, el paciente estaba alerta y orientada en espacio, tiempo y persona. Los antecedentes médicos incluían el diagnóstico de Esclerosis Múltiple recurrente-remitente y una cesárea. Además, la paciente experimentó una infección agresiva por VZV a los 12 años, lo que provocó su hospitalización. Los antecedentes familiares incluían Esclerosis Múltiple en una prima, pariente de tercer grado, por parte de madre”, indican los autores del caso.
Destacaron que las terapias modificadoras de la enfermedad para este paciente cambiaron varias veces a lo largo de los años. En el 2001 se inició interferón beta 1-b por siete años, hasta el año 2008, cuando se cambió a natalizumab. Continuó con natalizumab durante tres años, cambió a acetato de glatiramer en 2011 y luego a dimetilfumarato en 2013.
El tratamiento con alemtuzumab ha mejorado significativamente las capacidades cognitivas, el control motor y la calidad de vida en general de este paciente. Foto: Farmacéutica.
“En ese momento, la paciente sufrió más de tres recaídas en menos de 2 años, lo que motivó un último cambio. La primera dosis de alemtuzumab se administró en octubre de 2016, la segunda dosis en octubre/2017 y la tercera dosis en mayo/2019”, detalla el caso.
Añadieron que el tratamiento con alemtuzumab ha mejorado significativamente las capacidades cognitivas, el control motor y la calidad de vida en general de este paciente.
Pertinencia del caso
Los especialistas explican que los pacientes con Esclerosis Múltiple, recurrente-remitente muy activa, tienen opciones de tratamiento limitadas y es necesario estudiar la eficacia para la recuperación del deterioro en estos pacientes.
“La discusión de este caso permite conocer los resultados beneficiosos de Alemtuzumab en pacientes con Esclerosis Múltiple recurrente-remitente muy activa. Respalda hallazgos previos de estabilización de la enfermedad luego del tratamiento con alemtuzumab de la Esclerosis Múltiple altamente activa. También sirve como evidencia de mejoría clínica y disminución en la progresión después de seguir el tratamiento propuesto para la Esclerosis Múltiple altamente activa o agresiva”, informan.
Además, concluyeron que este caso sirve como información educativa sobre los beneficios terapéuticos de alemtuzumab en pacientes con Esclerosis Múltiple recurrente-remitente.
“En concreto, este fármaco parece beneficioso para aquellos pacientes con Esclerosis Múltiple muy activa que no han podido mejorar o controlar su enfermedad con DMT. El informe de estos hallazgos permite el análisis de alemtuzumab como un tratamiento eficaz para pacientes que padecen Esclerosis Múltiple muy activa o agresiva. En general, este estudio destaca la importancia de investigar los subtipos de Esclerosis Múltiple con respecto a las definiciones, el diagnóstico y el tratamiento”, finalizaron.
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad autoinmune debilitante que actualmente afecta a alrededor de 2.8 millones de personas en todo el mundo. Se estima que 2,387 de ellas viven en la isla de Puerto Rico.
Acceda al caso aquí.