Aunque no existe una cura para este tipo de patologías, un tratamiento adecuado y un diagnóstico temprano, puede mejorar la manifestación y sintomatología de la afección.
La artritis reumatoide (AR) podría causar distintas afecciones, no solo en las articulaciones, sino también puede afectar los pulmones, ojos y arterias de las personas que la padecen. Frente a este desalentador panorama, recordamos la importancia del diagnóstico temprano -método más efectivo para contrarrestar los graves síntomas de esta enfermedad-.