El equipo del español Juan Carlos Izpisúa logra crear estructuras similares a blastocistos, a partir de una sola célula cultivada de oreja de ratón.
La marihuana o el cannabis afecta la plasticidad de los circuitos neuronales, además su componente psicoactivo influye en la maquinaria necesaria para mantener el balance de proteínas en el hipocampo