Manejo Dirigido va a la Sinfónica

Medicina y Salud Pública

    Manejo Dirigido va a la Sinfónica

    El presidente de una compañía de seguros médicos recibió un boleto de cortesía para asistir a un concierto de la orquesta sinfónica de su ciudad. Se trataba de asistir para ver y escuchar la ejecución de la Sinfonía Inconclusa de Schubert. Por otros compromisos, el presidente no podía asistir al concierto y le regaló el boleto al encargado de manejo dirigido de su compañía.

    Al siguiente día de celebrado el concierto, le preguntó al oficial encargado de manejo dirigido cómo le había ido durante el concierto y éste le entregó la siguiente nota:

    1. Por un período considerable de tiempo los oboes no participan en nada y cuando lo hacen es por muy poco tiempo. Su número debe ser reducido  evitando así tiempos de inactividad.
    2. Los doce violines interpretan las mismas notas que los instrumentos de viento.  Esto es una duplicación innecesaria por lo que esta sección debe ser reducida drásticamente.
    3. Si fuera necesario tener un volumen de sonido alto, éste se puede obtener utilizando amplificadores potentes.
    4. Se utiliza mucho el uso de semicorcheas (cuatro notas  por tiempo). En su lugar se deben utilizar notas más cortas, corcheas  (dos notas por tiempo). Si hacemos eso podremos utilizar músicos con pocas destrezas en lugar de músicos experimentados y ahorraríamos dinero.
    5. No existe propósito alguno de que los instrumentos de viento repitan los pasajes musicales que han sido tocados por los instrumentos de cuerda.  Si esos pasajes redundantes se eliminan el concierto se reduciría de dos horas a veinte minutos.
    6. Esos músicos han practicado tanto que podemos eliminar al director de la orquesta, ese que se coloca al frente y maneja  una batuta para dirigir.
    7. Esta sinfonía tiene dos movimientos. Si Schubert no logró su objetivo musical al final del primer movimiento, debió detenerse ahí, el segundo movimiento es innecesario y debió ser eliminado.
    8. En vista de lo anterior se puede concluir que si Schubert hubiese tomado en cuenta estas recomendaciones hubiese: ¡tenido tiempo para completar su Sinfonía Inconclusa!

    Esta comparación entre manejo dirigido y una orquesta sinfónica fue publicada en una revista psiquiátrica en agosto de 1998, de autor desconocido.  El pueblo de Puerto Rico necesitará los servicios de esa especialidad más frecuentemente durante los próximos cuatro años y lo que será peor ante los problemas económicos que confrontará el Plan de Salud del gobierno.

    El mensaje que provee el director de manejo dirigido es una deformación del plan de salud aplicando una reducción en los servicios de salud que deben recibir los pacientes, todo en aras de economizar y lograr mayores ganancias para los accionistas de los planes de seguros de salud. El paciente pasa a un segundo lugar al racionarle los servicios de salud que debe recibir. La similitud entre un manejo dirigido totalmente deformado y una orquesta sinfónica desmembrada representa una comparación muy acertada.     

    Igualmente, la deformación que ocurre en Puerto Rico con el concepto de manejo dirigido a llevado al racionamiento de los servicios de salud, el cierre de las redes de médicos, reduciendo artificialmente aun más la escasez de médicos en el país, el uso de hospitalistas (médicos empleados por los planes médicos) cuya labor es evitar la admisión de los pacientes a los hospitales resultando en mayores ganancias para el plan médico y los médicos hospitalistas. Al final del año esas ganancias se las distribuyen entre el plan médico y los médicos hospitalistas, esto puede ser legal pero es inmoral. La disminución en los referidos a especialistas, aun cuando el paciente lo requiere, redunda en mayores ganancias para los planes de salud en detrimento de los pacientes.  Pero los profesionales de la salud continúan en una actitud pasiva y derrotista ante las actuaciones de los planes médicos.  Los planes médicos siguen actuando impunemente porque el gobierno tampoco los fiscaliza ni le pide cuentas. ¡Ah, pues bien!

    Enrique Vázquez Quintana MD, FACS

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