Mientras, laboratorios continúan el estudio científico de la condición.
La apnea del sueño es un problema “bien serio” en Puerto Rico. La población puertorriqueña tiene unas comorbilidades que hacen “que la condición sea peor aquí”.
No obstante, la investigación científica continúa en auge y ha logrado que la medicina contra la condición en Puerto Rico mejore ampliamente la calidad de vida de estos pacientes.
A juicio de la Dra. Lissette Jiménez Dávila, neuróloga especialista en medicina del sueño del VA Caribbean Healthcare System hace dos años, la realidad clínica en la isla ha hecho que el trastorno del sueño se desarrolle con síntomas más severos por enfermedades como la obesidad, diabetes e hipertensión.
Estos pacientes también pudieran desarrollar paralelamente insomnio. “Es un problema serio en todo el mundo, pero en nosotros es más serio todavía. Tenemos unas condiciones asociadas que hacen que la enfermedad sea más prevalente aquí en la isla”, afirmó. Además, son más los varones los que se ven afectados por dicha obstrucción en las vías respiratorias durante el sueño.
Más allá, no existe un reporte de cuántos accidentes se han producido por la somnolencia de la afección. No obstante, la especialista declaró que una persona con falta de descanso equivale una persona con altas dosis de alcohol conduciendo en la carretera.
“La mayoría de las personas cuando chocan no dicen que chocaron por falta de sueño”, afirmó.
“Afortunadamente ha aumentado la conciencia de la condición entre los médicos y estamos diagnosticando más. También lo estamos tratando más a tiempo”,
“Tenemos mucha satisfacción por el tratamiento que se imparte aquí (en Puerto Rico), porque mejoran en muchas áreas de su diario vivir, tienen más energía y aparte de eso, otras condiciones se benefician porque tienen mejor control de su diabetes, por ejemplo, el ánimo, el dolor, entre otras áreas.
“Estamos empezando a desarrollar proyectos de investigaciones. Hay más interés dentro del campo. Necesitamos continuar haciendo alianzas y colaboraciones entre colegas”, formuló. De otra parte, la neuróloga indicó que el sueño se está privando en la sociedad, incluyendo niños y adolescentes. Terapia de posición, medicamentos orales, cirugías, figuran entre las opciones de tratamiento.
